Una gota de energía pura
El médico inglés Edward Bach las creó en la década del 30 como una terapia alternativa para combatir afecciones psicoemocionales. Bendito Lunes entrevistó a Norma Antonia Álvarez, terapista holística, y tomó el testimonio de personas que han conocido su accionar y beneficios físicos y espirituales.
Por Nadia Bonora
Las flores fueron creadas por el inglés Edward Bach, licenciado en Ciencias, médico cirujano, bacteriólogo, patólogo y homeópata. En la década de 1930 comenzó su búsqueda en pos de solucionar desequilibrios psicoemocionales tales como el miedo, angustia, ira, confusión e intolerancia, entre otros. El objetivo de estos remedios florales es influir o prevenir padecimientos físicos y psíquicos.
Son un conjunto de 38 preparados naturales no farmacológicos que se elaboran a partir de la maceración en agua de flores maduras de diversas especies vegetales silvestres de la región de Gales e Inglaterra, que luego se diluyen en brandy (aguardiente obtenido a partir de la destilación del vino). Las flores también son conocidas con el nombre de remedios florales de Bach o esencias florales de Bach.
Para sentir resultados, la toma debe ser por un tiempo prolongado / Foto: Nadia Bonora |
En la actualidad, el tratamiento con flores de Bach es considerado una terapia médica alternativa y en general se lo conoce como una variante de la homeopatía. Esta última se caracteriza por el empleo de preparados altamente diluidos que pretenden crear los mismos síntomas que sufre el paciente. Su principal premisa es “lo similar se cura con lo similar”.
Norma Antonia Álvarez es terapista holística y reikista hace 10 años, y desde hace dos comenzó a trabajar con las flores. “Su creador, el doctor Bach, fue una persona muy enferma. Por eso comenzó a experimentar en él mismo. La primera flor que descubrió fue la Impatiens que sirve para tratar dolores”, explicó. Las flores son “para todo el mundo” ya que no tienen contraindicaciones.
Sus funciones son dos, una clínica y una emocional o psicológica. Para la función clínica se pueden tratar gripes, dolores estomacales u otra afección. Edward Bach entendió que la raíz de una enfermedad estaba unida a un factor emocional no resuelto. Existen tres estadios previos a un trastorno: el primero es el energético (que se manifiesta en el aura); el segundo es el emocional (cuando el padecimiento comienza a sentirse en ese nivel) y el tercero, cuando se manifiesta en síntomas subclínicos que no pueden ser detectados por diagnóstico ni aparatología. “Al llegar a ese estadio se observa la afección a un órgano a nivel físico”, manifestó la terapista.
- ¿Por qué son importantes las flores?
- Norma Álvarez: Lo importante es que son las aliadas indispensables para el recorrido interno de nuestras emociones. En general, al ser humano le cuesta mucho bucear internamente. Cuando una persona las ingiere es como si alguien la tomara de la mano para enfrentar miedos, angustias o desafíos. Es “recorrer la noche oscura del alma”, para sacar nuestras sombras, aceptarlas, enfrentarlas y solucionarlas. El accionar de las flores puede ser tan sutil que uno piensa “mirá cómo resolví esto”, pero en realidad ellas han hecho una parte de la labor. Son energía pura volcada en una gota de materia para trabajar a nivel energético.
Norma Antonia Álvarez es terapista holística y reikista hace 10 años, y desde hace dos comenzó a trabajar con las flores. “Su creador, el doctor Bach, fue una persona muy enferma. Por eso comenzó a experimentar en él mismo. La primera flor que descubrió fue la Impatiens que sirve para tratar dolores”, explicó. Las flores son “para todo el mundo” ya que no tienen contraindicaciones.
Sus funciones son dos, una clínica y una emocional o psicológica. Para la función clínica se pueden tratar gripes, dolores estomacales u otra afección. Edward Bach entendió que la raíz de una enfermedad estaba unida a un factor emocional no resuelto. Existen tres estadios previos a un trastorno: el primero es el energético (que se manifiesta en el aura); el segundo es el emocional (cuando el padecimiento comienza a sentirse en ese nivel) y el tercero, cuando se manifiesta en síntomas subclínicos que no pueden ser detectados por diagnóstico ni aparatología. “Al llegar a ese estadio se observa la afección a un órgano a nivel físico”, manifestó la terapista.
- ¿Por qué son importantes las flores?
- Norma Álvarez: Lo importante es que son las aliadas indispensables para el recorrido interno de nuestras emociones. En general, al ser humano le cuesta mucho bucear internamente. Cuando una persona las ingiere es como si alguien la tomara de la mano para enfrentar miedos, angustias o desafíos. Es “recorrer la noche oscura del alma”, para sacar nuestras sombras, aceptarlas, enfrentarlas y solucionarlas. El accionar de las flores puede ser tan sutil que uno piensa “mirá cómo resolví esto”, pero en realidad ellas han hecho una parte de la labor. Son energía pura volcada en una gota de materia para trabajar a nivel energético.
La naturaleza ofrece beneficios que ayudan a mejorar trastornos psicoemocionales / Foto: Nadia Bonora |
Efectos medicinales y compromiso
María Soledad Bedino tiene 34 años y es licenciada en Comunicación Social. Conoció estos remedios florales por una terapista hace algunos años: “Me encontraba en un momento especial de mi vida. Sentía mucha ansiedad y angustia y por eso me las sugirieron como terapia alternativa”. Bedino confesó que tomarlas la ayudó a atravesar situaciones de malestar espiritual y, lo más importante, “a liberar emociones contenidas del pasado”.
“Creo absolutamente en sus efectos medicinales pero entiendo que es algo que no se siente con las primeras tomas. Se trata de una terapia y, como tal, necesita que el individuo crea en ellas, se predisponga y haga su parte para alcanzar los resultados deseados”, aseguró Bedino.
Álvarez recordó un caso: “Traté a un hombre adulto que se había sometido toda la vida a un padre muy autoritario, así que le indiqué que tomara Centaury. Un tiempo después de tomarla, resolvió su situación y hoy en día dirige su propia empresa. Hizo un trabajo impresionante, puso los frenos y cambió para bien”. Las Flores de Bach enseñan a trabajar desde el amor y reconociendo que el otro es un ser humano. Así, aceptando a los demás con sus propias emociones y formas de ser, el individuo puede aceptarse a sí mismo.
La esencia Centaury se aconseja a aquellas personas a las que les cuesta decir que no y por eso tienden a ser dominadas por los demás. Son personas educadas, tranquilas y tímidas y por ese motivo no son buenas para hacer valer su voluntad.
“Todos somos parte de una misma historia, todos somos ‘uno’. Si en la sociedad hay gente enferma, somos una sociedad enferma en general. Es como una ‘familia’. Si uno de sus miembros tiene gripe, todo el conjunto familiar se ocupa de atenderlo, llevarlo al médico y ayudarlo. Como sociedad debemos ser responsables de nuestra salud física, mental y espiritual para poder ser parte de esta unidad. Por eso es tan importante sanarnos emocionalmente”, aseguró Norma Álvarez.
“Creo absolutamente en sus efectos medicinales pero entiendo que es algo que no se siente con las primeras tomas. Se trata de una terapia y, como tal, necesita que el individuo crea en ellas, se predisponga y haga su parte para alcanzar los resultados deseados”, aseguró Bedino.
Álvarez recordó un caso: “Traté a un hombre adulto que se había sometido toda la vida a un padre muy autoritario, así que le indiqué que tomara Centaury. Un tiempo después de tomarla, resolvió su situación y hoy en día dirige su propia empresa. Hizo un trabajo impresionante, puso los frenos y cambió para bien”. Las Flores de Bach enseñan a trabajar desde el amor y reconociendo que el otro es un ser humano. Así, aceptando a los demás con sus propias emociones y formas de ser, el individuo puede aceptarse a sí mismo.
La esencia Centaury se aconseja a aquellas personas a las que les cuesta decir que no y por eso tienden a ser dominadas por los demás. Son personas educadas, tranquilas y tímidas y por ese motivo no son buenas para hacer valer su voluntad.
“Todos somos parte de una misma historia, todos somos ‘uno’. Si en la sociedad hay gente enferma, somos una sociedad enferma en general. Es como una ‘familia’. Si uno de sus miembros tiene gripe, todo el conjunto familiar se ocupa de atenderlo, llevarlo al médico y ayudarlo. Como sociedad debemos ser responsables de nuestra salud física, mental y espiritual para poder ser parte de esta unidad. Por eso es tan importante sanarnos emocionalmente”, aseguró Norma Álvarez.
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La búsqueda del bienestar parte de uno mismo / Foto: Nadia Bonora |
José Mateo Cisera es gastroenterólogo y tiene 33 años. En una etapa de su vida se encontró en medio de una situación cargada de stress y recurrió a la terapia floral: “Las necesité para bajar decibeles, estar más tranquilo y tener armonía espiritual”. Si bien cree en sus beneficios, confesó que fueron “leves” porque el tratamiento duró poco: “Creo en la sabiduría de la naturaleza pero la ingesta debe ser a largo plazo para lograr un efecto notorio”.
- ¿El tratamiento debe complementarse?
- Norma Álvarez: Lo importante es el compromiso del individuo. Nosotros somos guías, asesores, acompañantes del proceso, pero si el paciente no quiere mirar dentro de sus emociones, más no podemos hacer. A la larga las flores trabajan, pero si la persona colabora, actúan aún más. Pero ¡ojo! porque ocurre que muchas veces primero hacen una limpieza del organismo, y por ende, incrementa el síntoma.
En relación a esto, Álvarez contó: “Una señora tiró el frasco porque ‘la hacía llorar’. Y le dije: ‘¡Pero claro mi amor! ¿Cómo vas a sacar lo que te angustia si no llorás?’. Le expliqué que no tenía que asustarse, que serían uno o dos días, y que por favor nunca más tirara las flores. Hay que hacernos cargo de nuestra oscuridad, sacarla afuera, es la mejor forma. No hay nada mejor en la vida que estar en paz con uno mismo”.
En relación a esto, Álvarez contó: “Una señora tiró el frasco porque ‘la hacía llorar’. Y le dije: ‘¡Pero claro mi amor! ¿Cómo vas a sacar lo que te angustia si no llorás?’. Le expliqué que no tenía que asustarse, que serían uno o dos días, y que por favor nunca más tirara las flores. Hay que hacernos cargo de nuestra oscuridad, sacarla afuera, es la mejor forma. No hay nada mejor en la vida que estar en paz con uno mismo”.
Otros testimonios
Matías Mengarelli es empleado administrativo y tiene 30 años. En medio de la búsqueda de un tratamiento alternativo, encontró la respuesta en el poder de las flores: “Mi cuñada me aconsejó que las tomara y no se equivocó. Me sentí mejor de ánimo, más seguro para interactuar o dirigirme a los demás. Fue un período en el que estuve enfocado y concreto con las decisiones que necesité tomar”.
María Laura Roncatti, de 33 años, es psicóloga y tiene una opinión dividida sobre su eficacia: “Comencé a tomarlas para combatir un trastorno de ansiedad. Sinceramente no registré un cambio tangible ya que las tomé por poco tiempo. Creo que en realidad actúan cuando la persona toma conciencia de su propio ser, es decir, nos hace bien recordar más seguido que es importante cuidar de uno mismo. Me parece que el quid de la cuestión pasa por ahí”.
María Laura Roncatti, de 33 años, es psicóloga y tiene una opinión dividida sobre su eficacia: “Comencé a tomarlas para combatir un trastorno de ansiedad. Sinceramente no registré un cambio tangible ya que las tomé por poco tiempo. Creo que en realidad actúan cuando la persona toma conciencia de su propio ser, es decir, nos hace bien recordar más seguido que es importante cuidar de uno mismo. Me parece que el quid de la cuestión pasa por ahí”.
“No importa cuál sea nuestro trabajo en el mundo, limpiabotas o monarca, terrateniente o campesino, rico o pobre; mientras hagamos ese trabajo en particular según los dictados del alma todo está bien; y podemos además descansar seguros de que cualquiera que sea la posición en la que nos encontremos, arriba o abajo, contiene esta posición las lecciones y experiencias necesarias para ese momento de nuestra evolución, y nos proporcionara las mayores ventajas para el desarrollo de nuestro ser”.
Dr. Edward Bach
Dr. Edward Bach
MUY INTERESANTE EL TEMA!! SI BIEN NO CREO MUCHO EN ESTE TIPO DE TERAPIAS ALTERNATIVAS, LO POSITIVO ES QUE AL ESTAR HECHO CON PRODUCTOS NATURALES NO ME DA MIEDO PROBARLO. LO HE PROBADO UN A O DOS VECES Y NO NOTÉ NINGÚN CAMBIO, TENDRÍA QUE HACER EL INTENTO POR UN TIEMPITO A VER QUE PASA..
ResponderEliminarESTEFI.
Muy buen artículo, estoy de acuerdo con la utilización de productos naturales q ayuden a conectarnos con nosotros mismos. Me parece q lejos de ser poco efectivos, los considero la mejor forma de ayudar nuestro cuerpo y espíritu.
ResponderEliminarSaludos