lunes, 1 de octubre de 2012

Escoliosis

Origen, síntomas y tratamientos de una enfermedad silenciosa

* Dedicado a Yuliana Rosconi *

Por Sofía Rosconi

 Una de las premisas principales a la hora de hacer frente a la mayoría de las enfermedades tiene que ver con “prevenir antes que curar”. De hecho, no son pocas las patologías que tienen como única medida de caución el diagnóstico precoz. La escoliosis no es la excepción, sin dejar de mencionar que los síntomas tampoco se caracterizan por ser demasiado notables, por lo que es necesario buscarlos y no esperar a que se manifiesten por completo.


Escoliosis es un término que deriva del griego y significa “curva”. En medicina, esta palabra se utiliza para designar una deformidad de la columna vertebral, en la cual ésta no sigue una línea recta (como dispone el reloj biológico del cuerpo humano) sino que crece asimétricamente, adoptando forma de “C” o “S”. Uno de los aspectos más curiosos de esta anomalía es que el 80 por ciento de las curvas son idiopáticas, es decir que su origen es desconocido (el 20 por ciento restante puede vincularse a enfermedades neuromusculares o malformaciones vertebrales congénitas). 


 Según un informe realizado por la Asociación Argentina de Ortopedia y Traumatología (http://www.aaot.org.ar/) la escoliosis afecta a aproximadamente un 3 por ciento de la población menor de 16 años del país. Las cifras no se detienen allí, ya que diez de cada cien jóvenes pueden tener una escoliosis mínima y tres de cada cien tienen la posibilidad de padecer una curva más importante que requiera de un tratamiento activo. Por otro lado, en La Web de la Espalda (http://www.espalda.org/) explican que en la escoliosis la columna se dobla y adquiere dos o más curvas ostensibles en el frente. Además, aclaran que la columna no sólo se dobla a través de las vértebras que la integran, sino que también rota (razón por la cual la cintura o los hombros del paciente toman un aspecto desigual). Se trata de una deformidad de tipo tridimensional que requiere de un diagnóstico temprano, el cual es muy útil y muchas veces permite tratamientos menos agresivos.


Síntomas de una enfermedad silenciosa

 El doctor Alejandro Ferrer, médico cirujano especialista en el tratamiento quirúrgico de diversas patologías de la columna, aseguró que la gente puede presentar dicha deformación a cualquier edad, aunque la idiopática tiene lugar más que nada entre los diez y los catorce años. “La escoliosis de origen desconocido ocurre en pleno período de salud: la infancia y el inicio de la adolescencia. Se manifiesta en el momento en que los niños crecen con rapidez o 'pegan el estirón', y es mucho más frecuente en el sexo femenino que en el masculino”, explicó. También marcó una importante diferencia entre la escoliosis con la denominada “actitud escoliótica”, a la cual definió como una mínima incurvación de la columna, que es usualmente postural. “Es preciso saber que no es una deformidad ni una etapa anterior o previa de la verdadera escoliosis”, manifestó el experto en Ortopedia, Traumatología y Cirugía Espinal.

 Ademaś de todo esto, el médico informó que una de sus facetas más engorrosas está relacionada con su desarrollo, que es tan lento como silencioso. Tal como se mencionó anteriormente, los síntomas de esta enfermedad no suelen ser muy notorios. Los progenitores de niños con escoliosis generalmente no se dan cuenta de la existencia de la anomalía hasta que la curva se desarrolla de forma significativa. En relación a esto, Ferrer marcó la importancia de que los padres no se sientan culpables por no detectar a tiempo la patología, ya que notar una asimetría incipiente en la columna puede ser sumamente complicado, especialmente en un período en el que el cuerpo sufre tantos cambios. No obstante, aconsejó a los adultos que sean ellos quienes reparen en si se producen determinados indicios de la deformación en la etapa de crecimiento de sus hijos, tales como: cuerpo que se inclina hacia un lado, altura desigual en los hombros, una cadera por encima de la otra, protuberancia en las costillas de un lado de la columna o fatiga en la espalda.


Tratamientos: ¿cuál es el más apropiado?

 El doctor Carlos Legarreta, miembro de la Sociedad de Patología de la Columna Vertebral y médico en el Hospital de Niños “Ricardo Gutiérrez” de Buenos Aires, habló con Bendito Lunes sobre la cuestión del tratamiento de la escoliosis. Afirmó que la elección del mismo depende de varios factores, que son la edad del paciente, cuánto le falta por crecer, el ángulo y el patrón de la curva y el tipo de escoliosis que tenga. En líneas generales, los procedimientos para corregir la patología son los siguientes: la simple observación acompañada de trabajos de correción postural y control de la función respiratoria (con pacientes que no han terminado de crecer y tienen una curvatura de menos de 25 grados), el uso de un corset ortopédico confeccionado a medida (con pacientes que no han terminado de crecer y tienen una curvatura de 25 a 30 grados) y la intervención quirúrgica (con pacientes que presentan una curva mayor a 45 grados). “En la cirugía se enmenda la escoliosis utilizando elementos metálicos y agregando injerto de hueso para que la columna se sostenga corregida por sí misma”, manifestó Legarreta. Asimismo, el especialista desmintió la efectividad de otros supuestos tratamientos, tales como la manipulación, la estimulación eléctrica, el ejercicio corrector y los deportes como natación. “Aún no existe evidencia científica que demuestre que estos métodos detengan o corrijan la evolución de la enfermedad”, explicó.  


Problemas socioeconómicos

 Cuanto más grande sea el grado de la curvatura escoliótica, más comprometida se verá la salud del paciente y mayores serán sus problemas al llegar a la adultez. “Si la enfermedad alcanza cierta severidad y no se trata, puede generar complicaciones cardiopulmonares, mucho dolor e incluso alteraciones psíquicas. La anomalía altera la apariencia del afectado”, comentó el doctor Ferrer. Hizo hincapié en que la posibilidad de frenar la desviación de la columna afectada por escoliosis o bien enderezarla por completo depende en gran medida de que tan anticipado sea tanto su diagnóstico como su tratamiento. En este sentido, Rosario (y Argentina en general) tiene una asignatura pendiente; ya que cuenta con instituciones médicas y profesionales de primer nivel, pero los tratamientos no son accesibles para cualquiera y el desconocimiento general que existe sobre el tema no ayuda en lo absoluto.

 “En su mayoría, las condiciones socioeconómicas de la gente traen como consecuencia que los casos de escoliosis se agraven y avancen hasta tal punto que la cirugía es la única solución. La intervención quirúrgica es una medida terapéutica que se reserva para los casos más severos”, indicó Ferrer. Si el diagnóstico precoz no falla, la posterior derivación del paciente para que se asista lo antes posible es esencial. Pero, ¿cuál es el costo verdadero para tratar la escoliosis? Amelia Ferrari, madre de una menor de doce años que padeció esta deformación de su columna, reveló a Bendito Lunes algunos detalles en relación con las tarifas del tratamiento: 

 Corsét (que la niña utilizó durante un año aproximadamente, cuando la curvatura no era tan grave): $1500
 Operación y prótesis (conformada por dos elementos metálicos, tornillos especiales y huesos artificiales): $66 mil
 Internación: Lo “cubrió” la obra social (*). Pero tuvo que pagar un sellado provincial de $600 (dinero que se lleva el gobierno de Santa Fe)
 Sesiones de médico: $200 cada sesión (la niña tuvo escoliosis durante dos años y visitó al especialista seis veces por año aproximadamente) 
 Radiografías y resonancias magnéticas: Fueron cubiertas por la obra social

 (*) Ferrari aseguró que lo que “cubrió” la obra social con respecto a la internación es relativo. “Con los $66 mil que pagué por la operación y las prótesis también pagué con creces la cama, la comida, los medicamentos y todos los servicios que le brindaron a mi hija en el hospital. Conozco muchos casos de personas que también se operaron de escoliosis y pagaron menos de la mitad de lo que pagué yo. El desconocimiento y el deseo de que tus seres queridos estén bien muchas veces te juegan una mala pasada”, confesó.  


La escoliosis de cara al futuro


El doctor Legarreta afirmó que todavía hay muchas cuestiones relacionadas con la escoliosis que se desconocen, como por ejemplo la razón concreta por la cual las columnas de los chicos empiezan a torcerse. “Hoy en día se considera que la culpa la tendrían algunas alteraciones del sistema nervioso central que controlan la postura, la simetría y los reflejos, las cuales a su vez causan irregularidades hormonales transitorias que provocan dicho crecimiento anormal”, dijo el especialista. Además de las causas de la escoliosis idiopática, los expertos están investigando otros asuntos, tales como el crecimiento, las alteraciones en músculos y nervios, los efectos de la cirugía a largo plazo y las consecuencias de no tratar la patología. 


Utopía

 La salud no debería tener un precio, pero el abuso existe porque se trata de un costo que todos estamos dispuestos a pagar. La gente no tendría que verse obligada a arriesgar su bienestar por ahorrar dinero o directamente por no tener los recursos para cubrir costosos tratamientos médicos. La Medicina Prepaga, las Obras Sociales y el Hospital Público, generalmente, son una mentira.

 Hace miles de años, un profeta habló de una supuesta etapa en la que ya no habrá más enfermedades. En una parte, el augurio expresaba: “(...) Ningún residente dirá: 'estoy enfermo'. Los ojos de los ciegos serán abiertos, y los oídos mismos de los sordos serán destapados. El cojo trepará justamente como lo hace el ciervo, y la lengua del mudo clamará con alegría”.

 Los avances tecnológicos, cada vez más relevantes, agrandan la esperanza de vivir algún día en un mundo sin enfermedades. Pero el continuo aumento del costo de la sanidad apuñala el sueño del ciudadano común y hace que las palabras del vidente no sean más que una bonita utopía.



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