Una vida con el floklore y la ciudad desde su nacimiento
 

Vicente Cassetta llegó a Granadero Baigorria cuando apenas esta se estaba formando y hoy en día es de los personajes más queridos del lugar

Por Rodrigo Almada 

 Un gaucho de los de antes y un personaje característico de la ciudad de Granadero Baigorria. Vicente “Coco” Cassetta es una de esas personas que tiene muchas historias para contar ya que es de los habitantes con más antigüedad de la ciudad, la que ha visto crecer con sus propios ojos. Es fiel estandarte de la cultura nacional del gaucho, recorriendo el país de peña en peña y fue quien cabalgó desde San Luis hasta Baigorria trayendo consigo el busto del granadero que pone nombre a esta ciudad.

 La historia comenzó en el año 1946 cuando llegó a un pequeño pueblo de nombre Paganini (en 1950 se transformó en Granadero Baigorria) junto a sus padres, inmigrantes italianos, y sus cuatro hermanos. “En aquel momento había poquitas casas, lo único que estaba era la ruta 11 y en frente solamente campo. Antes era todo Paganini y San Fernando, luego esto se fue dividiendo en distintos lotes, que hoy son los distintos barrios que conocemos”, comentó Cassetta.

 En su niñez pasó por el ya desaparecido Colegio San José de la localidad vecina de Capitán Bermúdez, y mientras estudiaba, trabajaba como ayudante de albañil, entre otras cosas. “Cuando tuve los 18 años ingresé a Celulosa Argentina. Ahí trabajé 23 años y me retiré en el ‘79. Luego de eso me dediqué a ser vendedor, un poco ambulante y un poco distribuidor de calzados”, contó “Coco” sobre los diversos trabajos durante su vida.

 El cambio llegó cuando comenzó a sentir una inclinación hacia “el paisano, el folklore y la tradición”. “Hace unos 20 años, comenzaron a formarse centros tradicionalistas. Entonces despertó un poco en mí el querer unirme a esa agrupación que se llamaba 'Rodeo'. Estuve un tiempo en ella y luego fui a otra, que todavía existe y es la única que quedó, 'La Tacuara'”, rememoró Cassetta. 

 A raíz de esto, un día como cualquier otro del año 1999, le llegó el rumor de que se iba a construir el busto del Granadero Baigorria, el cual no poseía la ciudad. “Un amigo mío le salió la idea de hacer una cabalgata, aprovechando que yo tenía caballos, para traer a la ciudad la estatua. Y así empezamos a trabajar”, comenzó a recordar “Coco” de aquella cabalgata. Para hacer dicha escultura, apareció Aldo Beltroco, escultor del teatro Colón, que mediante las radios escuchó sobre el tema y se ofreció a realizar la figura. Pero acá hubo un pequeño problema que resolvió con rapidez: “El busto del Granadero Baigorria no existe, ni fotos había de Juan Bautista Baigorria. Entonces, el escultor lo hizo pensando en la apariencia de un granadero en aquel tiempo”, reveló Cassetta. 

 Desde ese momento, hasta el final de la cabalgata, transcurrieron catorce meses. “Un mes antes habíamos hecho el recorrido, desde donde partieron todos los granaderos, en su mayoría puntanos, de Renca, San Luis. Ya en el año 2000, hablamos con el Intendente de esa ciudad y le pareció muy buena la idea, y nos propuso que fueramos para la fiesta del pueblo”, expresó “Coco”. Además de él, otras dos personas más realizaron dicha cabalgata: Raúl La Vega y Albano Gonzalez, fallecido hace más de un año. A la vez, estos tres eran acompañados por el hermano de “Coco” en un camión, que fue prestado por un amigo, el cual sirvió para llevar a los caballos en distintas ocasiones. 

 Luego de un pequeño parate en Córdoba, partieron rumbo a Renca. “Nos recibieron muy bien, estuvimos en la fiesta del pueblo, desfilamos y el día 12 de septiembre partimos hacia Granadero Bagirorria. Nos despidieron todos, hasta el Intendente”, dijo Cassetta. En el regreso, fueron bien recibidos en todos los puntos que iban pasando, pero reconoció que todo estuvo bien armado gracias a ellos: “Íbamos pegando afiches, los dábamos a los centros comunitarios del lugar, al intendente o los tirábamos por el pueblo, con la inscripción ‘Cabalgata Histórica desde Granadero Baigorria hasta Renca’, con las fechas de cuando íbamos a volver a pasar. Entonces, la gente nos esperaría ese día con una fiesta”. 

 El problema fue cuando volvieron a Baigorria. Al llegar, sólo los esperaban sus respectivas esposas, el cura del lugar y el Intendente. “Por temas políticos, el busto estuvo seis meses guardado y recién en julio del 2001 lo colocaron en la plaza”, confesó “Coco”. Pero por suerte con el tiempo esto se fue cambiando y la gente del lugar lo empezó a reconocer, mediante distinciones como la de Ciudadano Ilustre entre otros. 

 “Me han hecho muchos poemas, me han caricaturizado, me han escrito canciones”, comentó Cassetta, y continuó: “Hay un respeto por los que hicimos la cabalgata. O sea, hicimos algo que deja un rastro porque está el busto y debajo de el están los nombres de los tres”.  

 Hoy, a los 72 años, conduce un programa en la televisión local llamado “El Rancho del Gringo Viejo” haciendo honor a su caballo que lo acompañó en la cabalgata hacia el busto del Granadero Juan Bautista Baigorria.